Opinión
Editorial: Más empleados y menos afiliados
La sostenibilidad financiera del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en el tiempo se vuelve a mostrar endeble.
La sostenibilidad financiera del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en el tiempo se vuelve a mostrar endeble. Informes emitidos por la prensa en días pasados revelan que las exigencias y requerimientos políticos predominaron sobre los fundamentos técnicos en la estructura del organismo.
Las cifras hablan por sí solas. Mientras en los últimos 5 años, desde 2013 hasta diciembre de 2018, el incremento en el número de afiliados –cuyo aporte es vital para sostener a la institución- apenas fue del 13,5%; en ese mismo período la nómina burocrática de la entidad tuvo un aumento de casi el 100% al pasar de 19.520 empleados a 38.154, lo que significa 18.634 trabajadores más.
Este desmesurado incremento dejó de lado la resolución 475, del año 2015, con la cual se intentó frenar las contrataciones burocráticas sin argumentos técnicos. Y hay más por investigar: los informes revelan que las mayores contrataciones se dieron en las administraciones de Ramiro González y de Richard Espinosa.
Felipe Pezo, vocal del directorio del IESS, pone más candela a la hoguera y señala que el aumento de personal no solo respondió a cuestiones políticas, sino también a la “venta de cargos”. Hay mucho que investigar ahí.