En el Colegio 10 de Agosto, ubicado en las calles Carchi y Bomboná, en el barrio San Juan, centro de Quito, la consulta popular de este domingo 16 de noviembre de 2025 reunió a varias generaciones. Hasta este recinto llegaron adultos mayores que rozan los 90 años, mientras que madres jóvenes acudieron a votar con sus bebés recién nacidos en brazos.

La mañana fue fría y con llovizna, pero eso no impidió que los ciudadanos se acercaran a sufragar. Según datos del Consejo Nacional Electoral (CNE), en este plantel están empadronadas cerca de 8.000 personas para participar en la consulta popular y referéndum.

Entre ellas estuvo Consuelo Aluisa, de 59 años, quien acompañó a su tía Salvadora Chicaiza, de 88. “Ya sé que, en mi caso, el voto no es obligatorio, pero he venido por la necesidad de que mi Ecuador siga adelante”, comentó Consuelo, mientras ayudaba a Salvadora a subir y bajar las gradas del recinto.

Muy cerca del Colegio 10 de Agosto se quedó Oswaldo Aules, esposo de Salvadora. “Mi esposo ya tiene 90 años. No se mueve para nada; incluso debo estar pendiente porque hace unos días estábamos desayunando y se atoró”, relató.

Salvadora aseguró que no tuvo dudas al votar “sí” en la pregunta sobre la reducción del número de asambleístas, una de las cuatro interrogantes de la consulta popular. “En lo que estoy de acuerdo es en esa pregunta. ¿Para qué sirven los asambleístas? Toda la vida yo he vivido de mi trabajo”, dijo.

Camina lento porque le duele la cadera. Tiene ocho hijos y ya perdió la cuenta del número de nietos. “Por ellos voto”, afirmó con decisión.

Madres jóvenes y bebés también llegaron al recinto

La presencia de bebés también llamó la atención en la jornada. En brazos de Lisbeth Padilla, de 23 años, llegó Teo, quien nació hace apenas un mes. Junto a ellos también estuvo Lis, de 2 años y 8 meses.

Lisbeth contó que se graduó de bachiller con especialización en contabilidad, pero no ha logrado conseguir empleo. “Voto por obligación y porque no quiero que haya trabajo por horas. No vamos a recibir nada de sueldo. Ahora pagan poco, imagínese con algún cambio”, expresó.

La joven aseguró que no ve resultados concretos de las elecciones en su vida diaria. “El arroz, el pollo no lo puedo comprar con esta consulta; la inseguridad tampoco se arregla”, lamentó.

En Ecuador, 3,9 millones de ciudadanos están habilitados para votar en la consulta popular y referéndum impulsados por el presidente Daniel Noboa, quien promueve también la instalación de una Asamblea Constituyente.

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