El barrio 2000 de Ambato, provincia de Tungurahua, aún no se recupera de la conmoción por la muerte de la policía Nicole Chisag Guamán, de 23 años, quien se decidió a vestir el uniforme de la institución inspirada por familiares que también integran la Policía.

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Nicole se preparaba para el curso de ascenso, pero la noche del lunes 18 de agosto de 2025 su vida se apagó por un disparo en la cabeza. El hecho se produjo dentro de la vivienda que la mujer compartía con su pareja.

Según la versión que su conviviente, Andy Vergara, le dio a la policía, él tomó el arma que estaba sobre la cama y al manipularla, “por curiosidad”, esta se accionó accidentalmente y la bala impactó a la joven policía.

El teniente coronel Roberto Gavilánez, jefe del Distrito Ambato Sur, confirmó que el conviviente de Nicole está detenido. “De acuerdo con las primeras diligencias, el hecho sería accidental. Sin embargo, seguimos con las pericias para determinar lo que realmente ocurrió”, indicó. La institución también aclaró que la joven portaba su arma de dotación porque se encontraba en su jornada laboral.

Una bebé de tres meses huérfana

“Era tranquila, disciplinada, respetuosa”, recordó Carmen Pérez, una vecina que asegura haberla visto esa misma mañana en la Unidad de Policía Comunitaria de Santa Rosa. “En la noche ya nos enteramos de lo peor”, lamentó la mujer.

En Santa Rosa, la parroquia donde creció Nicole, el dolor es palpable. “Ella siempre quiso ser policía, se sentía orgullosa de servir al país”, comentan sus familiares, aún incrédulos.

Hoy, se recuerda con dolor la historia de la joven que soñó ser policía y hace tres años cumplió ese anhelo. Ella, con gran entusiasmo, ya se preparaba para el curso de ascenso. El vacío que deja Nicole es enorme, en especial en la vida de su hija, de apenas tres meses de nacida.

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