Las investigaciones por presunta minería ilegal dieron un giro este 7 de noviembre, luego de que las Fuerzas Armadas, con inteligencia militar y miembros de la Policía Judicial, desarticularan un centro clandestino de procesamiento de oro en el sector de San José de Morán, parroquia Calderón, norte de Quito.

El operativo se realizó en una vivienda que, según las autoridades, estaría vinculada a una red criminal que trasladaba material aurífero. Este presuntamente llegaba desde la parroquia Buenos Aires, en Imbabura, hacia la capital, para luego enviarlo mediante rutas aéreas hacia mercados internacionales, informó el Ejército en un comunicado.

En el inmueble se aprehendió a una persona, de 18 años, y se incautaron 34 sacos de carbón valorados en cerca de 1,2 millones de dólares. Según el reporte militar, el laboratorio clandestino tenía capacidad para producir hasta nueve kilos de oro por semana, lo que representaba ganancias estimadas de hasta 3 millones de dólares para la presunta estructura ilícita.

Además, dentro de la vivienda se hallaron sustancias químicas utilizadas para la extracción y refinación de oro, como 11 sacos de cianuro, seis de bórax y uno de soda cáustica. También se encontraron equipos de comunicación, teléfonos celulares, un uniforme militar, municiones y documentos de identidad, lo que sugiere la existencia de una red organizada con roles definidos.

Fiscalía dijo que no halló elementos suficientes

El aprehendido fue llevado a la Unidad de Flagrancia, donde se desarrolló una audiencia para determinar su situación legal. Durante la diligencia, el juez señaló que la aprehensión se realizó de manera legal.

Pero que, hasta ese momento, la Fiscalía no contó con los elementos suficientes para calificar la flagrancia del delito, por lo que se solicitó su liberación. El caso quedó en una investigación .previa.

En la audiencia se explicó que el informe técnico emitido por la Agencia de Regulación y Control Minero es preliminar y requerirían análisis complementarios para confirmar si el material hallado corresponde a minería ilegal. La Fiscalía solicitó tiempo para reunir más pruebas sobre la estructura operativa, la procedencia del material y el alcance de la red involucrada.

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