El avance de la inteligencia artificial generativa está revolucionando la forma en que se crea y consume contenido digital. Lo que antes parecía exclusivo del ingenio humano ahora puede ser realizado por algoritmos capaces de producir textos, imágenes y videos con sorprendente calidad. 

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En este nuevo escenario, Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI y creador de ChatGPT, advierte que profesiones aparentemente consolidadas, como la de los influencers y los creadores digitales, podrían estar cerca de desaparecer.

Durante una entrevista en el programa TBPN, Altman señaló que la automatización impactará no solo a los creadores de contenido, sino también a otros oficios tradicionales como la atención al cliente. Según explicó, el futuro de la comunicación visual dependerá de la colaboración entre humanos y máquinas. “Si el contenido es genial, no creo que te importe mucho si está generado completamente por una IA o por un humano”, expresó, destacando la creciente indiferencia del público ante el origen de lo que consume, siempre que este sea original y de calidad.

Un nuevo modelo creativo: humanos e IA trabajando juntos

En la misma conversación, junto a Bill Peebles, responsable del proyecto Sora, Altman profundizó en cómo los creadores de contenido deberán adaptarse a un entorno dominado por la tecnología. La irrupción de la inteligencia artificial ha transformado la manera en que las audiencias buscan y disfrutan la información. Para el CEO de OpenAI, los usuarios solo desean “contenido bueno, original, reflexivo, nuevo y útil”, sin importar si su origen es humano o automatizado.

La propuesta de Altman se orienta hacia un modelo donde la creatividad humana y la inteligencia artificial trabajen de forma complementaria. Este equilibrio busca que los creadores digitales se adapten y utilicen la tecnología como una herramienta que expanda sus capacidades. En esta línea, OpenAI ha desarrollado Sora, una plataforma que genera videos a partir de texto, mostrando cómo la automatización puede potenciar la imaginación y transformar la forma tradicional de producir contenido audiovisual.

La conexión humana sigue siendo esencial

Pese a su fuerte defensa de la automatización, Altman reconoció que la dimensión humana continúa siendo esencial en la creación de contenido. 

Si bien los espectadores priorizan la calidad, también buscan una conexión personal con quien está detrás de la obra. “Solo quieres contenido genial. Ahora, también quiero algo de conexión humana con él”, expresó el directivo de OpenAI en TBPN.

El directivo estableció un paralelismo con la fascinación de los lectores por conocer la historia detrás de un libro que los ha marcado. 

Esta comparación evidencia que, pese al avance tecnológico, el vínculo emocional entre el autor y su audiencia permanece intacto. En última instancia, la inteligencia artificial puede crear, pero solo el ser humano logra dotar de alma y emoción a la obra.

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