La controversia alrededor de la bioserie Chespirito: Sin querer queriendo no para. La producción, escrita por Paulina y Roberto Gómez Fernández —hijos del fallecido Roberto Gómez Bolaños—, ha sido bien recibida por muchos espectadores, quienes la consideran un retrato más humano del icónico comediante mexicano. No obstante, también ha generado una tormenta mediática protagonizada por Florinda Meza, viuda del actor, quien no solo se ha mostrado inconforme con la narrativa, sino que ya contempla la posibilidad de emprender acciones legales.

El episodio siete, titulado “Con melón o con sandía”, ha sido el epicentro del conflicto. En él se dramatiza el fin del matrimonio entre Gómez Bolaños y su primera esposa, Graciela Fernández, y se sugiere que Florinda Meza fue la causante directa de la ruptura. La escena, ambientada en Acapulco durante la grabación de un especial de El Chavo del 8 en 1977, ha sido calificada por los fans como una de las más impactantes, pero para Meza, se trata de una distorsión absoluta de los hechos.

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La actriz, quien interpretó a Doña Florinda en la popular serie, ha usado sus redes sociales para criticar duramente la producción. En Instagram, respondió a una seguidora argentina que le preguntó si en Acapulco “se pudrió todo”, haciendo referencia a la narrativa de la serie. “Una de las cosas que más tristeza me da es que hayan escogido ese capítulo tan querido por el público para mancharlo con tantas mentiras”, respondió Meza.

Las polémicas declaraciones de Florinda Meza

Aunque no mencionó directamente a Paulina ni a Roberto Gómez Fernández, la actriz sí cuestionó con firmeza a los responsables del proyecto. “El programa y los personajes son un tesoro muy valioso en el corazón de millones. Eso hay que cuidarlo, protegerlo, no ensuciarlo con melodramas vulgares que solo existen en su imaginación. La verdad fue otra”, declaró, visiblemente afectada.

El punto más tenso de esta disputa llegó cuando Florinda Meza fue consultada por otra usuaria sobre una posible demanda por daño moral. Aunque negó haber iniciado ya un proceso legal, sí dejó claro que no lo descarta. “Hay elementos jurídicos para hacerlo”, afirmó, dejando abierta la posibilidad de llevar el conflicto a los tribunales.

Por ahora, Sin querer queriendo continúa generando comentarios y dividiendo opiniones. Mientras tanto, el futuro de esta disputa legal dependerá de cuánto esté dispuesta Meza a avanzar para proteger la memoria de su esposo y su propia imagen pública frente a lo que considera una ficción ofensiva.

Recordemos que este 24 de julio estrena lo que sería el último capítulo, y tal como se anticipa en el tráiler, la historia se centrará en uno de los momentos más significativos en la carrera de Chespirito: el rodaje de la película El Chanfle, el último gran proyecto en el que todos los personajes emblemáticos trabajaron juntos.

Hasta ahora se sabe que no habrá una segunda temporada. Tanto Pablo Cruz Guerrero, quien interpreta a Chespirito, como el guionista Miguel Islas, han afirmado en entrevistas que el proyecto fue concebido como una serie de una sola entrega. 

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