En un ambiente de tristeza y pesar, el creador de contenido asesinado en el noroeste de Guayaquil, Alberto Vicente Castro Cárdenas, fue velado este jueves 25 de septiembre por su familia. Los parientes, además de intentar afrontar su proceso de duelo, trataban de recolectar dinero, pues tuvieron que endeudarse para cubrir los gastos fúnebres.

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La esposa del ciudadano comentó a un medio de comunicación televisivo que tuvieron que prestar dinero para el velorio y el sepelio.

“Hay que pagar el préstamo. Yo no tengo trabajo fijo, por eso estoy pidiendo apoyo”, expresó angustiada la mujer.

Esa sensación se mezclaba con dudas y dolor. Ella, al igual que los demás allegados, anhela conocer cuál fue la razón del ataque armado durante el cual falleció Castro, pues, según dijeron, él no andaba en malos pasos y tampoco recibió amenazas anteriormente. 

El hombre perdió la vida mientras se movilizaba en un auto negro con su amigo Mauro Fernando Marín Cortaza, quien igualmente murió como consecuencia de los impactos de proyectiles que recibió. El hecho criminal se produjo la mañana del miércoles 24 de septiembre, en la cooperativa 12 de Octubre, ubicada en el sector de Mapasingue Oeste.

Lo último que hizo Alberto

Antes de la tragedia, Castro salió de su vivienda, en esa misma zona, acompañado de su esposa. Fueron a dejar al hijo de ambos a la escuela. Después volvieron a su hogar para descansar.

Luego, Marín llegó en el vehículo a esa cooperativa para encontrarse con Castro. Tenían previsto ir a un gimnasio, una actividad que solían realizar con frecuencia.

Poco después de que partieron, en el sector se escucharon disparos. Los familiares de Castro salieron desesperados a confirmar la noticia: sujetos armados y a bordo de un carro blanco ejecutaron una serie de disparos contra el coche en el que iban los amigos.

Agentes policiales encontraron un automotor con similares características al usado por los implicados, abandonado en la ciudadela Martha de Roldós. Pero hasta ahora no hay sospechosos aprehendidos.

Su sueño y pasión

Alberto Castro siempre estuvo interesado en la actuación. Fue parte de Los Caminantes, un grupo de producción de contenidos cómicos y reflexivos. Su esposa indicó que también tuvo participaciones en producciones televisivas y compartió grabaciones con actores reconocidos.

“Su sueño era ser conocido y hacer reír a la gente. Le encantaba hacer reír a las personas”, recordó con emoción la mujer.

Marín, amigo de Castro, ayudaba a realizar las filmaciones de Los Caminantes, según se pudo conocer. A Marín se le inició una investigación previa en 2023 por suplantación de identidad, pero el proceso fue archivado.

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