La última vez que vieron a Dave Ramos Pozo fue el 14 de abril en un barrio de Rumiñahui, al oriente de Quito y fue hallado dos días después deshidratado y con heridas afuera de un colegio ubicado en un tramo de la Simón Bolívar, en el norte de la ciudad.

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El joven, de 22 años, le indicó a su padre que se dirigía en su vehículo a una universidad, pero en realidad se iba a encontrar con una mujer que conoció en una aplicación de citas en internet en un centro comercial de Carapungo.

Dave la recogió y fueron a la avenida Real Audiencia a beber dentro del automóvil. Luego, la chica le pidió para ir a un mirador. El joven conducía por la avenida Simón Bolívar y perdió el conocimiento.

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Despertó a orillas de un río y caminó por un bosque hasta llegar a una carretera en donde un taxista lo recogió y lo llevó hasta las afueras de un colegio. Una familiar que lo buscaba lo reconoció y lo trasladó a un hospital, donde los médicos determinaron que el joven estaba bajo el efecto de alguna sustancia.

Cuando pudo recuperarse contó lo sucedido a los policías, quienes investigan el caso.

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