Sandra, vecina de Solanda, en el sur de Quito, cuenta que ya no tendrá que correr por el callejón que conduce a su casa. El miedo que sentía al pasar junto a una vivienda donde se vendían drogas desapareció tras el allanamiento realizado por la Policía.

La habitante afirma que en esa propiedad, además de la venta de estupefacientes, se reunían personas armadas todos los fines de semana. “Vivíamos cerca del enemigo, pero el miedo no nos permitía denunciarlo”.

Un operativo liderado por la Policía Judicial permitió desarticular a una banda conformada por cuatro sujetos y una mujer, quienes supuestamente se dedicaban al tráfico de drogas.

Las evidencias encontradas en Solanda

En la intervención también participaron miembros de unidades especiales e, incluso, necesitaron a un agente antiexplosivos porque encontraron una granada dentro de la casa. Además, dos pistolas, municiones, una funda de cocaína, una balanza y otros elementos con los que presuntamente procesaban el alcaloide fueron decomisados como evidencia.

El miedo que tienen los habitantes de Solanda

Uno de los detenidos tiene 52 años y registra varios antecedentes penales, entre ellos por tráfico de drogas. Al parecer, este sujeto y el propietario de la casa, quien es conocido con el alias de Alejín, serían quienes lideraban esta estructura delictiva.

Según agentes de Inteligencia, estarían aliados al grupo de delincuencia organizada Los Lobos, al que se relaciona con una serie de crímenes que se han registrado en Solanda durante los últimos seis meses.

De hecho, a 10 metros de donde fue el allanamiento, el 29 de marzo fueron acribillados dos sujetos que supuestamente se dedicaban a vender estupefacientes. El hecho quedó registrado en una cámara de seguridad y se ve cómo tres sujetos ‘amagaron’ que querían comprar ‘bazuco’ y, cuando los vendedores se distrajeron para sacar el producto, fueron atacados a tiros. Las víctimas tenían al menos 15 impactos de bala en sus cuerpos.

La policía tratará de determinar si los seis sospechosos que fueron detenidos durante el allanamiento tenían relación con los asesinados en marzo, para que proporcionen más datos que ayuden a la investigación en curso que se lleva por este caso.

Sandra y otros vecinos han pensado en salir del barrio para vivir en otro lugar, porque afirman que la inseguridad es insostenible. Añaden que se realizan operativos con frecuencia, pero no han servido de nada.

El mismo ministro del Interior, John Reimberg, ha recorrido la zona con un fuerte contingente militar, pero esto no ha sido suficiente para detener la escalada de violencia.

Uno de los barrios más violentos

Las cifras que maneja el Ministerio del Interior señalan que en lo que va del año se han registrado ocho muertes violentas en este sector. Sin embargo, según los archivos de EXTRA serían 10. El último doble crimen se registró en la calle José Bravo la noche del 8 de mayo del 2025, cuando un grupo de tres jóvenes conversaban en la vereda.

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Ellos fueron atacados por motorizados, quienes acabaron con la vida de dos chicos. El tercero sobrevivió al ser atendido de inmediato en un hospital.

La policía ha indicado que en este barrio popular se estaría disputando una guerra entre bandas criminales y esto surgiría a partir del asesinato de alias La Patrona y su pareja, quienes presuntamente extorsionaban a los comerciantes de la calle José María Alemán, mejor conocida como La J.

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