El buen villano siempre será aquel que nos erizará los pelos ante el más mínimo de sus gestos. Los hay de todo tipo: los que producen empatía (a veces, simplemente, porque sus víctimas son aún peores que él), los que son tremendamente exagerados o los que se apegan a un realismo tan extremo que incluso duele contemplar sus actos en la gran pantalla. ¿Cuál es tu favorito?

Alex Delarge

Este personaje, interpretado por el actor Malcolm McDowell, pertenece al filme de Stanley Kubrick La naranja mecánica, estrenado en 1971. Se pasaba de sátiro ultraviolento —la violación de la joven mientras canta Singin’ in the rain’ sigue siendo una escena imbatiblemente horrorífica—. Su imagen resulta igual de aterradora y desagradable.

Patrick Bateman

Christian Bale es el protagonista de la película American Psycho (2000). Este personaje tiene gracia que alguien tan obsesivo y cruel como Patrick Bateman termina cayendo bien al espectador.

Quizás sea porque es capaz de soltar hachazos sobre la cabeza de su víctima mientras baila Huey Lewis and The News. O porque es imposible que Christian Bale no nos acabe cayendo mal en ninguna película.

Darth Vader

Uno de los personajes más recordados de la saga de La guerra de las galaxias no podía faltar en esta lista. Interpretado por David Prowse (con la voz de James Earl Jones).

Es uno de los villanos más emblemáticos nunca escritos. Además, ahora dicen que puede regresar a la saga contemporánea. No sabemos si la noticia nos gusta o no, pero en todo caso da buena prueba de su eterna valía.

Voldemort

El malvado de la cinta Harry Potter y las reliquias de la muerte (2010) es encarnado por Ralph Fiennes. Da más miedo desde la invisibilidad, cuando se habla de él (sin nombrarlo), como mera presencia diabólica oculta en las sombras, como la magia negra, como la rabia al acecho. Por eso su imagen debía ser acorde a su maldad: un rostro ígneo, sin nariz, sin cabello, sin cejas ni párpados.

Cruella de Vil

Betty Lou Gerson le da vida en la película 101 dálmatas (1961). Fue una de las más grandes villanas del Disney clásico. Es obsesionada por los abrigos de pieles.

Tiene la mitad izquierda de su cabello blanco y la mitad derecha de color negro, y siempre intenta secuestrar a unos dálmatas cachorros para quitarles la piel, para robar utiliza a dos sirvientes, Horacio y Gaspar.