Más de 60 organizaciones de la sociedad civil agrupadas en la Coalición por la Movilidad Segura impulsan una reforma al Código Orgánico Integral Penal con el objetivo de reducir los siniestros viales, que hoy son la segunda causa de muertes violentas en Ecuador. Según la coalición, el país registra la mayor mortalidad vial en Sudamérica, con un promedio de once fallecidos en accidentes de tráfico cada día.

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¿Por qué se plantea una reforma al Código Penal?

Las cifras que motivan la iniciativa son contundentes: en 2024 el exceso de velocidad estuvo presente en el 45 % de los siniestros viales, provocando “dos de cada diez muertes en las vías”, y conducir bajo los efectos del alcohol aumenta diecisiete veces la probabilidad de morir en la vía. Además, el alcohol fue factor en el 7 % de los siniestros reportados. 

Frente a esos datos, las organizaciones piden ajustes normativos que permitan sancionar con mayor eficacia los comportamientos que más matan en las carreteras.

¿Qué cambios específicos propone la Coalición por la Movilidad Segura?

La coalición sugiere varias modificaciones puntuales al proyecto de reforma del Código Penal que actualmente se discute en la Asamblea Nacional y cuyo segundo debate está previsto antes de que concluya 2025. Entre las propuestas más relevantes figuran:

• Alineación del límite de alcohol en la sangre con la recomendación de la OMS (0,5 g/L) y establecimiento de tolerancia cero para jóvenes, conductores novatos y motociclistas
• Eliminación de los “rangos moderados” en la tipificación del exceso de velocidad para sancionar según el exceso real
• Endurecimiento de sanciones y ajuste de umbrales cuando la conducción bajo alcohol o velocidad excesiva cause lesiones o muertes

¿Cómo cambiaría el límite por alcohol y por qué importa?

Actualmente, explicó la coalición, “en Ecuador, la sanción más alta se aplica desde 1,2 gramos por litro, el doble del límite recomendado por la OMS (0,5 gramos por litro), equivalente a beber una botella de whisky”. La propuesta busca bajar ese umbral y aplicar medidas preventivas y punitivas más acordes con evidencia internacional para reducir mortalidad. 

Además, se plantea tolerancia cero para ciertos grupos considerados más vulnerables o de mayor riesgo.

¿Y la velocidad? ¿Qué significa eliminar los “rangos moderados”?

Los defensores de la reforma argumentan que los llamados “rangos moderados” diluyen la responsabilidad y dificultan sancionar a quien superó límites de forma significativa. 

La idea es que la ley contemple sanciones proporcionales al exceso real de velocidad —no rangos amplios— para incentivar el cumplimiento y reducir el impacto letal sobre peatones y usuarios vulnerables. Como subraya la coalición: “La velocidad es el factor más mortal: un peatón atropellado a más de 50 km por hora tiene escasas posibilidades de sobrevivir”.

¿Qué esperan los impulsores y cuál es el llamado a la Asamblea?

Sofía Gordón, coordinadora de la Coalición por la Movilidad Segura, planteó a EFE que el objetivo no es “castigar más, sino sancionar mejor y con justicia. Las leyes deben proteger la vida y reducir la impunidad. Hoy, la Asamblea tiene la oportunidad histórica de salvar vidas con una reforma coherente y urgente”. La coalición urge que estas propuestas se incorporen al proyecto de ley en trámite para que la normativa penal proteja con mayor eficacia a conductores, motociclistas y peatones.

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