La violencia en Ecuador ha alcanzado niveles críticos, marcada por explosiones en Guayaquil, Cuenca y Naranjal. Desde la detonación de junio en La Bahía hasta los coches bomba recientes en la avenida Joaquín Orrantia y el puente de Churute, los atentados han causado víctimas y mantienen en alerta a la ciudadanía.

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El Gobierno considera estos incidentes como actos de terrorismo, señalando a organizaciones criminales vinculadas al narcotráfico como responsables. Pese a los esfuerzos de las autoridades, los atentados continúan y no se ha logrado frenar la actividad de los grupos responsables.

13 de marzo: Explosión cerca de la Penitenciaría del Litoral

La madrugada del 13 de marzo de 2025, un vehículo cargado con explosivos detonó en la vía a Daule, a pocos metros de la Penitenciaría del Litoral. La explosión causó daños en seis automóviles, dos de ellos consumidos por el fuego, y afectó a varias viviendas cercanas, generando pánico entre los vecinos.

Dos personas resultaron heridas, un policía y un transeúnte, quienes fueron atendidos en centros de salud. Horas después, Segura EP informó del fallecimiento de un guía penitenciario por esquirlas del estallido.

3 de junio: Explosión en La Bahía

El 3 de junio, un artefacto explosivo detonó en la intersección de las calles Eloy Alfaro y Ayacucho, en pleno corazón de La Bahía, Guayaquil. Al menos seis locales comerciales resultaron dañados, y comerciantes denunciaron haber recibido amenazas previas, bajo la lógica de “pagar o sufrir un atentado”.

La Fiscalía investigó a un ciudadano presuntamente vinculado, pero fue liberado por falta de pruebas. Según la empresa municipal Segura EP, los sospechosos simulaban pertenecer a bandas como Los Lobos o Los Tiguerones, aunque no existían vínculos comprobados.

19 de junio: Explosión afuera de un club nocturno en Quito

La noche del 19 de junio, un artefacto fue arrojado frente a un local en el norte de Quito, a la altura de las avenidas De La Prensa y Logroño. El Cuerpo de Bomberos recibió la alerta a las 21:10 y varias personas resultaron heridas.

El ataque dejó un saldo de siete heridos, de los cuales dos fueron trasladados a centros médicos, mientras que los demás recibieron atención en el lugar. 

24 de julio: Atentado en zona residencial de Machala

En la madrugada del 24 de julio, cinco viviendas del barrio Rayito de Luz, en Machala, resultaron dañadas tras la explosión de un artefacto lanzado por dos sujetos en moto contra una casa arrendada. La onda expansiva afectó severamente a otras cuatro casas cercanas, una de las cuales perdió parte del techo y del cerramiento.

Los responsables huyeron del lugar antes de que la Policía pudiera intervenir. La cercanía de la explosión a la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) generó alarma entre los vecinos y puso en evidencia la audacia de los atacantes.

25 de septiembre: Coche bomba frente a la Penitenciaría del Litoral

Durante la noche del 25 de septiembre, una camioneta cargada con explosivos detonó afuera del Centro de Privación de Libertad Zonal 8, norte de Guayaquil. La explosión no dejó heridos ni fallecidos, pero causó alarma por la cercanía a la cárcel de máxima seguridad La Roca, donde permanecen procesados de alto perfil.

La Policía indicó que el vehículo fue abandonado por un hombre que huyó en otro automóvil antes de la detonación. El hecho puso en evidencia la continuidad de los planes de violencia pese a la vigilancia en la zona.

9 de octubre: Atentado frustrado en la Penitenciaría del Litoral

El hallazgo de un vehículo sospechoso cerca de la Penitenciaría del Litoral el 9 de octubre activó un amplio operativo policial y el cierre preventivo de la vía a Daule. En el automóvil se localizaron cinco tacos de dinamita adheridos a un tanque de gas y cargas secundarias preparadas para maximizar el impacto.

El vehículo fue neutralizado a tiempo por personal de Inteligencia y el atentado no se concretó. El ministro del Interior, John Reimberg, destacó que la acción impidió un ataque de gran magnitud que podría haber generado víctimas.

14 de octubre: Coche bomba en el norte de Guayaquil

Alrededor de las 18:30 del 14 de octubre, un coche bomba estalló en la avenida Joaquín Orrantia, frente al centro comercial Mall del Sol, generando pánico en la zona. El saldo fue de un muerto, un taxista que registraba el incendio, y al menos 30 personas heridas por vidrios y esquirlas.

Según el ministro del Interior, se trató de un artefacto de elaboración profesional. Un segundo coche cargado con explosivos fue desactivado por el equipo antiexplosivos de la Policía, previniendo más víctimas y destrucción.

15 de octubre: Explosiones en Churute y Cuenca

La mañana del 15 de octubre, un carro bomba detonó en el puente que conecta Churute con Naranjal. No se reportaron víctimas mortales, pero la infraestructura resultó afectada y el tránsito fue desviado mientras se realizaban labores de seguridad.

Ese mismo día, en la vía Cuenca-Girón-Pasaje, cuatro buses fueron alcanzados por la onda expansiva de cilindros de gas colocados en la vía. Un herido y daños materiales fueron el saldo del ataque, mientras uno de los cilindros fue asegurado por el equipo antiexplosivos.

Una escalada que mantiene en alerta al país

Los atentados recientes muestran que la violencia con explosivos se ha extendido a diversas ciudades de Ecuador, desde ataques extorsivos a comerciantes hasta coches bomba en zonas estratégicas.

Desde 2024, el presidente Daniel Noboa declaró un “conflicto armado interno” contra bandas criminales, ahora consideradas terroristas. Sin embargo, los atentados de octubre de 2025 muestran que la estrategia no ha logrado disminuir la capacidad de acción de estos grupos, manteniendo al país en alerta máxima.

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