La audiencia de conciliación y juzgamiento entre el reportero Leonardo Quezada, conocido como Lazito de la farándula, y la influencer Sarah Alarcón se realizó  este 26 de noviembre a las 08:30, en el Complejo Judicial Florida Norte.

Fueron tres horas en las que el juez escuchó las versiones de los testigos de Sarah. Después de eso, suspendió la audiencia, ya que tenía compromisos previstos. La nueva fecha se conocerá en los próximos días.

(Lea también: Sarah Alarcón y Lazito: Así se desarrolla la audiencia de este 26 de noviembre)

Los testigos de Lazito se quedaron ‘vestidos y alborotados’, ya que no pudieron rendir su versión. Entre ellos estaban: Lissette Cedeño, Aura Arce, Samantha Grey, el productor del programa Los hackers del espectáculo, Óscar Hidalgo, y los reporteros Dieter Hoffmann, Luis Rúa, Guillermo Carrillo y La Víbora.

Gabriela Pazmiño Yépez pide justicia para su hija

Entre los testigos de Sarah estaba su mamá, la expresentadora Gabriela Pazmiño Yépez, quien a su salida se notaba afectada y con señales de haber llorado dentro de la sala de audiencias. Ella manifestó a EXTRA estar muy afectada por todo lo sucedido y por haber tenido que atravesar este largo proceso que inició el 4 de julio, cuando, supuestamente, en el programa Los hackers del espectáculo, Lazito habría emitido comentarios ofensivos hacia Sarah.

Desde entonces, su hija presentó una denuncia bajo el artículo 396 del Código Orgánico Integral Penal (COIP). Esta normativa sanciona las expresiones ofensivas o de descrédito con penas que pueden variar entre 15 y 30 días de prisión, al tratarse de una contravención de cuarta clase.

Lazito habría abordado el tema de una entrevista que le hicieron a Sarah, en la que le consultaban sobre una supuesta vinculación con Cezar Augusto, pero ella no quiso dar declaraciones, pero no sin antes negar todo. Sin embargo, él mencionó que ella “presuntamente sería la manzana de la discordia y estaría con el brasileño”, esto a raíz de la ruptura sentimental entre Cezar y la presentadora Virginia Limongi.

La defensa de Alarcón sostiene que estas afirmaciones carecen de veracidad. Por eso decidieron llevar el caso por la vía legal, exigiendo pruebas de lo mencionado por el reportero en dicho espacio.

“Siento que se jugó con la sensibilidad de una sociedad que señala y sepulta a las personas que cometen ese tipo de errores, errores en los que Sara no tuvo nada que ver, pero quisieron dar a entender que ella fue culpable. Se vino una ola de linchamiento horrible”, dijo Gabriela a este Diario.

Gabriela confesó que mensajeó a Virginia Limongi para preguntarle si realmente existían pruebas de lo que se decía en el programa, ya que el mismo Lazito invitó a Pazmiño a escribirle a Virgnia para supuestamente concocer la evrdad de todo lo que pasaba.

“Le escribí y le pedí, como madre, que me dijera de dónde sale todo esto, y me dijo que salía de los pasillos de TC. Le pregunté: ‘Pero tú, siendo la persona afectada, ¿qué pruebas tienes?, ¿qué sabes?’. ‘No, eso pregúntaselo a ella, a los reporteros’, me respondió. Le dije que ya había hablado con Sarah, pero que quería su versión. Y me dijo: ‘No, es que a mí no me involucre’. Entonces, me di cuenta claramente de que no había nada, y eso me dio luz verde para actuar legalmente”, reveló Pazmiño.

Por otra parte, Sarah brindó una breve declaración a EXTRA y alegó que está tranquila, esperando la nueva fecha de la audiencia.

“Gracias por estar aquí. No quiero que piensen que no quiero hablar, simplemente estoy respetando un proceso legal; solo quienes pasan por esto entienden lo que significa. Yo no quiero manifestarme por esas razones, y por eso les pido, por favor, que me entiendan, porque me encuentro en un proceso legal”, agregó.

Lazito no quería que la audiencia se suspenda

Lazito dice estar tranquilo, pero admite que ya no quería que este proceso se alargue, sino que se resolviera ayer. “No es nada personal, solo fue una pauta del programa. Hablamos de algo que se viralizó en redes sociales. No sé por qué se han ensañado en contra de mi persona; espero no ser un chivo expiatorio. Yo siento que mi imagen se ha visto afectada por todo esto; sin embargo, hablo porque nos debemos al medio, hay que hablar”.

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