El sector bancario mundial cerró 2024 con resultados históricos y América Latina no fue la excepción. Así lo revela el Global Banking Annual Review 2025 de McKinsey & Company, que destaca tanto el desempeño global como el potencial de expansión financiera en la región, incluido Ecuador.

De acuerdo con el informe, los ingresos bancarios globales alcanzaron niveles récord, mientras que las utilidades sumaron 1,2 billones de dólares, la cifra más alta reportada por cualquier industria en la última década. Este impulso, al parecer, se vio favorecido por un entorno económico estable, márgenes amplios y un mercado que continúa transformándose con la entrada de empresas tecnológicas y clientes más exigentes.

Latinoamérica: resiliencia y altos márgenes

En este escenario, Latinoamérica sobresaldría por su resiliencia y rentabilidad. Durante 2024, los bancos de la región generaron 36.000 millones de dólares en utilidades netas, pese a enfrentar presiones como la inflación y la desaceleración de algunos mercados.

El estudio subraya que la región mantiene “márgenes estructuralmente altos”, lo que ha permitido a sus bancos conservar niveles sólidos de ingresos en proporción al tamaño de sus economías. Aunque el volumen de crédito y ahorro continúa siendo bajo respecto a otros mercados, esto abre una ventana de oportunidad: la posibilidad de ampliar servicios y llegar a segmentos que hoy permanecen subatendidos.

(Te invitamos a leer: Feriados Ecuador 2026: así queda el calendario oficial de días de descanso)

McKinsey anticipa, además, que los ingresos bancarios en América Latina podrían crecer alrededor del 10% anual hasta 2028, impulsados por productos de financiamiento para consumo y empresas, así como por el avance de la banca digital y nuevas soluciones tecnológicas.

¿Y Ecuador? ¿Es un mercado con espacio para avanzar?

En este panorama, Ecuador se inserta dentro del ciclo positivo regional. El informe enfatiza que la evolución del sector dependerá de la capacidad de las entidades financieras para apostar por la personalización del servicio, la eficiencia en la administración de recursos y el uso estratégico de la tecnología.

(Además: Cinco encuestas clave para entender y mejorar la experiencia de tus empleados)

Según el análisis, los bancos ecuatorianos que diversifiquen sus productos, digitalicen sus procesos y fortalezcan su oferta a nuevos segmentos tendrán mejores condiciones para crecer dentro del mercado latinoamericano en los próximos años.

El documento concluye que, tanto global como regionalmente, la banca atraviesa un momento de dinamismo sin precedentes. Para América Latina y Ecuador, esto representaría un potencial significativo para consolidar servicios financieros más modernos, accesibles y seguros, en línea con las nuevas demandas de los usuarios.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡Suscríbete a EXTRA!