Un adulto mayor del norte de Quito se llevó el susto de su vida que parecía una escena sacada de una telenovela. Cuando subió a su dormitorio luego de cerrar su negocio en la planta baja, encontró a un hombre desconocido instalado en su cama, durmiendo como si fuera dueño de casa.

¿Cómo encontró al intruso?

El afectado, de 78 años, contó que estaba listo para descansar después de ducharse. Se despidió de su esposa, que duerme en otro piso porque están separados, y al abrir la puerta de su cuarto vio lo impensable porque había un extraño roncando bajo sus cobijas.

El propietario de la casa creyó por un momento que se había equivocado de cuarto, pero luego de revisar las cosas que tiene en este confirmó la presencia del desconocido. No lo había visto nunca en su vida. No era vecino ni mucho menos algún familiar. 

El intruso resultó ser un joven, de 27 años, quien presentaba un fuerte aliento a alcohol y, según la Policía, no supo explicar cómo ni por qué terminó durmiendo en casa ajena. Cuando lo despertaron, parecía más confundido que el mismo dueño de casa. 

No justificó su presencia ni atinó a dar un motivo convincente de qué es lo que hacía allí. El dueño de la casa aseguro que podría estar drogado. 

El adulto mayor no quiso enfrentarlo directamente, así que llamó a la Policía y esperó a que llegaran. “De las iras no revisé si se llevó algo, porque ahí tengo mis herramientas de trabajo. Solo quería que lo saquen, porque uno no sabe si podía ponerse violento”, relató.

¿Qué pasó con el desconocido?

Finalmente, el joven fue aprehendido y llevado a la Unidad de Flagrancia para iniciar el proceso judicial en su contra por el delito de violación a la propiedad privada. 

Durante la diligencia legal, el procesado aseguró que había estado en una fiesta bebiendo bastante licor y no recuerda nada más. Tampoco sabe cómo llegó a la cama del adulto mayor que está en el segundo piso de una propiedad que no le pertenece. 

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!