El décimo tercer sueldo es una de las obligaciones laborales más esperadas cada diciembre en Ecuador: equivale a la doceava parte de las remuneraciones percibidas en el año y, según el Código del Trabajo, debe ser cancelado por el empleador hasta el 24 de diciembre, que este 2025 cae día miércoles. Sin embargo, no todos los que trabajan reciben este bono navideño en los mismos términos. Hay condiciones y excepciones que pueden modificar (e incluso impedir) su cobro.

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¿Quiénes quedan fuera del pago y por qué?

La primera gran distinción es la relación laboral. El beneficio corresponde a quienes están en relación de dependencia; es decir, trabajadores contratados bajo modalidades ocasional, eventual, temporal o a plazo indefinido. Por eso, grupos como profesionales independientes y trabajadores autónomos quedan fuera del esquema: no reciben el décimo tercer sueldo por la naturaleza de su contratación.

Otra excepción clave está ligada a procesos judiciales: cuando existe una orden de retención emitida por un juez de Familia respecto de pensiones alimenticias, el décimo tercer sueldo deja de ser íntegro. Aunque en términos generales la remuneración es inembargable (como lo dispone el artículo 91 del Código del Trabajo) esa inembargabilidad tiene una salvedad importante: los pagos pueden ser retenidos por mandato judicial para el pago de pensiones de alimentos.

¿Qué dice la ley sobre la inembargabilidad y las retenciones?

Según la normativa laboral, el décimo tercer sueldo es, en principio, irretenible e inembargable. Pero esta protección se enfrenta a la autoridad de una orden judicial.

Así "serán sancionadas en la forma prescrita en los artículos pertinentes de dicho cuerpo legal y, cuando no se haya fijado sanción especial, el director regional del Trabajo impondrá multas de un mínimo de tres y hasta un máximo de veinte sueldos o salarios básicos unificados…”, señala la ley. En la práctica, eso significa dos cosas: que las empresas deben cumplir con el pago hasta la fecha establecida y que cuando exista una orden de retención por alimentos, deben ejecutarla.

¿El décimo tercer sueldo aporta al IESS o se considera para impuestos?

No. El décimo tercer sueldo no sirve para realizar aportes al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), no se suma a las indemnizaciones por despido ni es deducible para efectos del impuesto a la renta. Es un pago adicional con un tratamiento legal y fiscal propio, independiente de otros rubros salariales.

¿Qué obligaciones tiene el empleador y qué sanciones enfrenta si no paga?

Los empleadores están obligados a cancelar el décimo tercer sueldo en el plazo legal. El incumplimiento puede acarrear sanciones, es decir, multas que van desde un mínimo de tres hasta veinte sueldos o salarios básicos unificados, aplicadas por la autoridad laboral cuando proceda.

Entonces, ¿quiénes no tienen derecho al décimo tercer sueldo?

• Profesionales y trabajadores autónomos (sin relación de dependencia)
• Personas contratadas fuera de las modalidades formales de trabajo (cuando no hay vínculo laboral)
• Trabajadores cuyo pago esté afectado por una orden judicial de retención por pensiones alimenticias (aunque el sueldo es en general inembargable, la orden judicial prevalece)

El décimo tercer sueldo parece sencillo en su cálculo, pero la letra pequeña y las condiciones legales pueden alterar quién lo recibe y en qué monto. Conocer las excepciones y las obligaciones de empleadores y jueces es clave para evitar sorpresas en diciembre: no siempre se trata solo de esperar el bono, sino de comprender las circunstancias que lo condicionan.

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