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Hasta los niños disfrutan de un relajante baño en las piscinas.Claudia Pazán

Baños de Cuenca: Aguas termales, tradición y sabor para disfrutar

Esta localidad cuencana se caracteriza por las aguas volcánicas. Hay balnearios, hosterías y spa

A nueve kilómetros del centro de Cuenca se encuentra la parroquia Baños, un lugar ideal para realizar actividades al aire libre, bañarse y deleitarse con su gastronomía tradicional.

Las principales características de esta parroquia de la capital de la provincia del Azuay son sus aguas termales y la amplia oferta de balnearios que aprovechan el recurso natural que nace de la Loma de los Hervideros. La oferta de centros turísticos con este servicio es variada, incluyendo spas, balnearios y hosterías.

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Uno de los centros turísticos más antiguos es la Hostería Durán, que está próxima a cumplir 100 años de trayectoria. A este sitio llegan a diario decenas de turistas y ciudadanos que buscan pasarla bien en sus piscinas, turco y spa.

Glenda Espinoza, de 65 años, comentó que visita la hostería cada fin de semana. “Mis nietos disfrutan mucho. Las piscinas son su lugar favorito por el agua caliente. Yo también aprovecho para ir al turco, que es una actividad relajante”, dijo.

Platos para disfrutar

Luego de visitar las aguas termales, es hora de deleitar el paladar, y para esto existen varias opciones. Por ejemplo, el restaurante El Rincón del Sabor, fundado por doña Yolanda Ramón, que tiene más de 50 años de trayectoria.

Baños también se ha convertido en una ruta para ciclistas. Pueden recorrer las comunidades de Huishil, Misicata, Narancay, Nero y Minas.

Paola Terán, empleada del lugar, detalló que el plato especial de la casa lleva fritada, sancocho, ensalada, llapingachos, mote sucio y mote pillo. Esta porción alcanza hasta para dos personas y cuesta $ 9.

En los diferentes restaurantes ofrecen diversos platos típicos.Claudia Pazán

Otro punto a visitar de Baños es su centro parroquial, donde se erige su imponente iglesia, construida entre 1950 y 1955 bajo la dirección del padre Alfonso Carrión Hermida. Es una réplica de la Catedral de La Inmaculada.

En los alrededores del templo ofrecen las tradicionales empanadas de viento. Sonia Vizhco revela que el secreto de este bocadillo está en el tiempo de amasar y de reposo de la masa. “Si vienes a Baños y no comes empanadas, es como no haber venido”, dice la mujer.

En esta parroquia puede comer sabroso, relajarse y conocer su tradición.

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