Antes de descargarle ocho impactos de bala, el verdugo de Diógenes Steven González Chiquito le pidió que le vendiera una libra de carne. Cuando el joven trabajador de la carnicería se dispuso a despachar el pedido, fue atacado a tiros y falleció.

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El presunto sicario, identificado como Jorbelis Gerardo Angulo Ureta, intentó escapar tras cometer el crimen, al mediodía del domingo 31 de agosto, en la cooperativa Trinidad de Dios, perteneciente al distrito Nueva Prosperina, en el noroeste de Guayaquil.

Sin embargo, moradores lo persiguieron y lograron detenerlo, entregándolo luego a militares de las Fuerzas Armadas que patrullaba la zona.

En ese mismo sector, el pasado 10 de agosto se registró una masacre que dejó 13 personas baleadas. Seis de ellas fallecieron, entre ellas un hombre, perteneciente a una iglesia cristiana que junto a su hijo se dedicaba a vender jugo de coco.

Confesó crimen

De acuerdo con una fuente policial, Angulo no registra antecedentes penales. “Según su testimonio, el detenido confesó que había recibido una oferta de 500 dólares para asesinar a González. La propuesta habría provenido de un conocido vinculado a la organización delictiva Los Tiguerones, quien le facilitó un arma Glock con 30 municiones y le ofreció movilizarlo en motocicleta”, explicó el investigador de la Policía.

El uniformado detalló que el día del ataque, Angulo descendió de la moto, ingresó al local y disparó en reiteradas ocasiones contra la víctima, quien laboraba como empleado de la carnicería.

“Tras el ataque, el arma se encasquilló, lo que le impidió continuar disparando. En su huida, arrojó el arma y fue abandonado por el conductor de la moto, lo que facilitó su captura por parte de los vecinos. Mostró una actitud fría y sin remordimientos al momento de confesar el hecho. Reconoció que disparó y que solo dejó de hacerlo porque el arma se encasquilló. Aseguró que lo hizo porque su madre padece cáncer y su esposa está embarazada, por lo que necesitaba el dinero”, agregó el oficial.

La motivación del crimen aún no está clara. Aunque el detenido dijo desconocer las razones del encargo, la Policía no descarta que se trate de un caso de ‘vacuna’ (extorsión) contra los negocios del sector, pese a que la víctima no era el propietario del local, sino únicamente un trabajador.

El cuerpo de Diógenes Steven fue trasladado al Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil, donde sus familiares realizaron los trámites para retirar el cadáver.

El joven, de 25 años, era el cuarto de cinco hermanos, no tenía hijos y desde hace tres años trabajaba en la carnicería.

“Mi hermano vivía en Monte Sinaí, todos los días salía a las seis de la mañana de la casa y regresaba a las dos de la tarde. No tenía enemigos, solo se dedicaba a trabajar, era el sustento de nuestros padres”, aseveró una de sus hermanas. 

Otro crimen: Lo acribillaron mientras caminaba

Cerca del mediodía de ayer lunes 1 de septiembre, en el bloque 21 de Flor de Bastión, un ciudadano que caminaba por el sector fue asesinado a tiros por sujetos que se movilizaban en una motocicleta. Hasta el cierre de esta edición, la víctima no había sido identificada.

El distrito Nueva Prosperina es la jurisdicción con mayor número de asesinatos en la Zona 8 y en el país. Con este caso, suma 475 muertes violentas en lo que va del 2025.

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