La tranquilidad de los ambateños se restaura de a poco. En un contundente operativo policial lograron la captura de una de las bandas delictivas que causaba pesadilla diaria a comerciantes y transeúntes del sector comercial de Ambato.

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La banda criminal, especializada en el robo y hurto a personas bajo las modalidades de 'lanzas' y 'carteristas', fue desarticulada la tarde del viernes 27 de junio del 2025.

La redada, fruto de meses de minuciosa investigación por parte de la Policía Judicial de la Subzona Tungurahua, culminó con la detención de cuatro presuntos delincuentes y el allanamiento de varios inmuebles que servían como su guarida y centro de operaciones.

Su método era simple pero efectivo: aprovechaban el descuido de la gente en las concurridas calles comerciales, en especial en las paradas de buses en los alrededores de los mercados céntricos en Ambato, para sustraer pertenencias en un abrir y cerrar de ojos.

"Un compromiso inquebrantable"

El coronel Jimmy Viteri, jefe de la Subzona de Policía en Tungurahua, destacó el arduo trabajo de sus equipos.

“Este resultado es una muestra clara de nuestro compromiso inquebrantable con la seguridad de la provincia. Luego de varios meses de trabajo técnico-investigativo, con el apoyo de unidades especializadas como Preventivas, Criminalística y el Grupo de Operaciones Motorizadas, logramos identificar a esta estructura criminal”.

En el allanamiento, los uniformados irrumpieron simultáneamente en tres inmuebles, incluyendo locales comerciales que, al parecer, eran utilizados como fachada. La escena era digna de una película de acción.

Los presuntos delincuentes, que no se esperaban el ataque, fueron sorprendidos. Las autoridades incautaron objetos robados que, se presume, pertenecían a las víctimas de sus atracos.

Se recuperaron 1588 dólares en efectivo, 83 joyas de diferentes modelos, seis anillos, dos relojes de valor y cinco teléfonos celulares que podrían contener pistas cruciales sobre su red de operaciones.

Además, encontraron dos chequeras bancarias y varias prendas de vestir que se sospecha usaban para cambiar su apariencia y evadir a las autoridades después de cometer un crimen.

También ocultaban 40 piezas arqueológicas, un indicio que abre nuevas líneas de investigación para conocer si también estaban involucrados en el tráfico de bienes culturales.

Entre el alivio y la desconfianza

La noticia de las detenciones fue recibida con sentimientos encontrados por los habitantes de Ambato. Por un lado, el alivio de ver que la justicia actúa, pero por otro, la desconfianza ante un problema que parece no tener fin.

"¡Ya era hora!", exclamó María Castro, una comerciante del centro. "Hace meses que esto es un desastre. No puedes salir con el celular en la mano, no puedes ir al cajero sin sentir que te están vigilando. A mí me robaron la cartera el mes pasado, justo en la calle. Espero que esto sirva de algo y no los suelten mañana".

Por su parte, Carlos Supe, un estudiante universitario, se mostró escéptico. "Es bueno que hayan hecho algo, pero el problema es mucho más grande. Meten a unos y salen otros. Esperemos que esta vez sea diferente".

Los detenidos se encuentran a la espera de la audiencia de formulación de cargos para que se defina su situación jurídica. (YIE)

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