La feria del lunes en Ambato se desarrolló con normalidad, pero con menor movimiento comercial en comparación a otras jornadas.

La incertidumbre generada por un posible paro nacional provocó que productores y comerciantes adelantaran sus ventas desde el domingo 21 de septiembre, cuando se registró un inusual incremento de compradores en los principales centros de abasto de la ciudad.

Mónica Tenén, secretaria de la Plaza Primero de Mayo —espacio al que acuden diariamente más de 600 pequeños productores— explicó que, pese a que en Tungurahua no hubo restricciones, la feria se activó con fuerza un día antes.

“El domingo hubo más afluencia de compradores y productores. Muchos temían un cierre imprevisto”, señaló.

En el Mayorista igual situación

Situación similar se vivió en el Mercado Mayorista de Ambato, considerado uno de los centros de distribución agroalimentaria más importantes del país.

Alcides Quintana, su gerente, confirmó que el lunes la actividad fue baja en comparación al domingo. “Ese día los comerciantes y sacadores abastecieron a todo el país. El domingo se adelantó prácticamente la feria”, indicó.

Recalcó que la atención se mantiene con su horario habitual, garantizando el abastecimiento seguro y oportuno a productores, comerciantes y consumidores.

No descartan movilizaciones

Mientras tanto, el Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT), después de seis horas de permanecer en asamblea con representantes de los cinco pueblos de Tungurahua: Chibuleo, Sawatoa, Kisapincha, Salasaka y Tomabela, resolvieron dar plazo de 48 horas al gobierno de Daniel Noboa para que atienda las peticiones del sector indígena.

Por su parte, Antonio Chachipanta, representante de la Organización de Indígenas Evangélicos de Tungurahua, expresó que no descartan la posibilidad de sumarse a futuras medidas, pero aclaró que, por el momento, aún esperan el pronunciamiento oficial de las comunidades.

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