Tres meses después de que la cuarentena se levantara, los juguetes sexuales se siguen comercializando como en época de confinamiento, especialmente mediante vía on line. ¿La razón? La privacidad que existe entre vendedor-comprador y el hecho de no tener que ir a un local al que muchas veces se ingresa con cierta timidez y vergüenza. Durante la cuarentena las ventas de estos accesorios de placer se triplicaron.

Pero, ¿cuáles fueron los juguetes más solicitados durante el encierro? EXTRA conversó con dos comerciantes, quienes detallaron la actividad de cada implemento y su uso según sus necesidades.

Gabriela Sánchez dueña de la tienda virtual Dulce de leche, comentó que los que más salida tuvieron fueron:

1. Satisfyer pro 2, un succionador del clítoris que, "fue solicitado por las solteras".

2. Jagger plus. Fue el más pedido por los matrimonios. Es un juguete en forma de C. Con la parte fina se estimula el punto G, mientras que la gruesa lo hace con el clítoris, labios vaginales y hueso pélvico.

"Lo curioso es que lo controlas con un mando a distancia y el hombre puede penetrar a la mujer mientras tiene el juguete puesto. Hay estimulación por parte de la penetración y de las vibraciones del artículo con el cual se estimula la vagina, mientras que en él causa un efecto retardante natural. Tenemos un catalogo con todas las posiciones y eso les llamaba la atención a los clientes", señala Sánchez.

3. Pipo. Es el más pedido en la categoría de los vibradores por lo pequeño de su tamaño. "Este lo pedían las chicas que viven con sus padres y que tenían temor de que fuese descubierto y pasar vergüenza, mide apenas 12 cms de largo y pasa desapercibido", aseguró la comerciante, quien llegó de 10 envíos diarios a 40, en toda la ciudad.

"Empezábamos las entregas a las 6 de la mañana hasta las 2 de la tarde que iniciaba el toque de queda, pero cuando tuvimos el salvoconducto los envíos eran más rápidos e incluso en la noche. Nos quedamos sin juguetes. El 24 de marzo se dispararon las ventas, nos compraron incluso de otras provincias", relata Gabriela quien, en dos años que lleva en el mercado, nunca deja de tantear la competencia.

"Se llevaron casi todo"

Otro sorprendido por el éxito de su negocio on line es Jorge Mujica, quien lleva 7 años en el negocio y vio como en la pandemia las ventas de su pet shop virtual, Play sex, subieron como la espuma, hasta un 300%.

"Actualmente mi stock es escaso, estoy a la espera de una nueva importación porque se llevaron casi todo. En tres meses vendí lo que usualmente comercializo en once", indica Mujica, cuyos clientes en un 80% son hombres influenciados por sus mujeres.

Admite que ellos son algo quedados a la hora de incorporar un juguete sexual en su rutina íntima. "Creemos que el juguete nos va a reemplazar. También puede ser por ego y machismo. Tenemos la idea errada de que nuestras compañeras se van a acostumbrar a usarlo y nos van a dejar de lado", sostiene Jorge.

De los artículos que más comercializó están los que se se usan con control remoto. "En la época de plena pandemia se vendieron más rápido, las parejas querían distanciamiento dentro de la casa y en la intimidad".

Los vibradores y dildos también tuvieron bastante acogida. "Los dildos no vibran, son realísticos y se parecen al pene. Son los que están en segunda posición. Otro aparato solicitado por los hombres fue el alargador de pene. Querían tenerlo más grande y grueso. Además pidieron mucha crema retardante, al igual que lubricantes", dice el comerciante quien era el encargado de hacer las entregas.